13 dic 2006

Pensar en diciembre

Las mañanas soleadas y frías, los días no laborables, el reencuentro con viejos amigos, las luces que adornan el centro de la ciudad, las compras de último momento, las ofertas que nunca son ofertas, la ennumeración de propósitos que no van a cumplirse, el olor a resina de los arbolitos naturales, la repartición de los abrazos, la chimenea encendida en casa de mis padres, los vasos rojos del Starbucks, la sala de cine vacía durante la última función del año…

2 comentarios:

Anónimo dijo...

a mí en diciembre me gusta compartir los días contigo.. y despertar con la certeza de tu cercanía..

Anónimo dijo...

leerte, escucharte. soñarte, pensarte... son cosas que debo agregar a mi lista...